EMMA FROST (MARVEL INFINITE SERIES)

Basic Figures, Wave 3, 2015.

Y vamos allá con la última de las series de las Marvel Infinite Series que será reemplazada en 2016 por las Marvel Legends Series en una serie de cambios de nombre de la colección absurdos ya que, ¿qué hay más rotundo y clarificador, incluso entrañable, que Marvel Universe? En cualquier caso, ésta no será una visión completa de todas las figuras que componen la serie sino de la mitad ya que tres de ellas en realidad no me interesan, por lo que en los sucesivos miércoles pasarán por aquí Northstar y Chameleon. Coloso, Korg y Deadpool, lo siento pero no estáis invitados...

Pero la primera, por ser una dama y porque sí es Emma Frost. Sé que soy un rancio anticuado pero para mi siempre será (y debería seguir siendo) la Reina Blanca del Club Fuego Infernal, una de las peores enemigas de La Patrulla-X, mutante de increíbles poderes mentales ataviada con un apretado corsé blanco... glups! Pero como tantos otros Emma Frost se ha pasado al lado de los buenos (momento en los cómics que me perdí durante mi ausencia), manteniendo eso sí un cierto resquemor y sospecha hacia ella por parte de algunos de sus ahora aliados. Lo de siempre, vaya. Lo que no es tan tópico es que se haya liado con el sosainas atormentado de Cíclope. ¡Vaya lista de ligues triunfales los de Scott Summers!

Esta figura de acción se desmarca totalmente de lo que se está convirtiendo en habitual en las Infinite Series debido al nuevo molde de cuerpo femenino ya que se trata de un producto que iba a ser lanzado en los últimos momentos del Marvel Universe, por lo que se beneficia del molde super-articulado que creo debutó en 2011 con la figura de X-23 dotado de diecinueve puntos articulados aunque no del todo bien aprovechados ya que el diseño de la cadera impide que las piernas se abran y flexionen en ese punto para adoptar poses de acción, viéndose constreñida a una limitación del movimiento.

En concreto Emma Frost utiliza el mismo cuerpo, salvo la cabeza, que la Bruja Escarlata diferenciado de otras superheroínas y villanas que utilizan el molde por los pies, cuyo calzado tiene tacones. Ese aspecto, sumado al peso que ejerce la capa provoca que su estabilidad sea terrible y hay que luchar con la figura para que se mantenga de pie, sobre todo si queremos que adopte alguna pose más allá de permanecer de pie y erguida.

En efecto, Emma Frost tiene sus cosas mejorables... pero no en cuanto a su aspecto, que es espléndido. Aunque reitero que hubiese preferido su encarnación como Reina Blanca, Hasbro nos ha ofrecido una interpretación estupenda de su habitual -y siempre escasa y prieta- vestimenta como integrante de los X-Men. El color blanco sigue siendo el imperante, por supuesto, pero dotado de un brillo que se ajusta bastante al personaje. Ceñidos pantalones que continúan hasta las botas con tacón, un top que deja al descubierto hombros y vientre, y largos guantes que cubren las manos con esos gestos de lanzar un hechizo mágico o un ataque telépata que ya vimos con la Bruja Escarlata.

La capa, extraíble y más corta que la de la Bruja, está estupendamente esculpida y pintada en blanco brillante en su parte exterior y azul en su parte interior contrastando de forma muy bonita con el blanco al que complementa de maravilla. La capa rodea a la figura por los hombros y por el cuello muy elegantemente y se cierra con un broche con la X dorada sobre fondo rojo. En el cinturón, pegado al cuerpo, vemos como hebilla otra X, en este caso blanca sobre fondo azul.

Una línea blanca a modo de gargantilla adorna el cuello de la Frost que conduce a su cabeza, totalmente de nueva creación y un muy buen trabajo de los diseñadores. Algo inquietante por los grandes ojos azules (en mi ejemplar, el izquierdo levemente desviado) es un rostro atractivo de expresión algo dura a la par que seductora y misteriosa. Las finas cejas rubias y los labios blancos están bien pintados y el tono de piel concuerda con el del cuerpo.

Aunque un trabajo más que notable, sin embargo me da la sensación de que el resultado final es que la cabeza es algo grande respecto al cuerpo, cosa perfectamente posible en una persona con poderes mentales y mutante, vaya. El rubio cabello también está muy bien esculpido, con la raya al centro y abriéndose levemente a la altura de la cara adoptando una bonita forma que no deja de recordarme al de la cantante de las Runaways (no el supergrupo de Marvel), Cherie Currie.

Una figura largamente esperada por los coleccionistas que al fin ve la luz y rellena un importante hueco en nuestras colecciones. Otra ausencia que tachamos y es que Hasbro parece que se está poniendo al día y lanzando aquellas figuras de acción cuyo lanzamiento fue retrasado, aunque la recuperación de estos "viejos" moldes (pero siempre mejores que los nuevos) cause algo de confusión al mezclarse con el nuevo estándar imperante de articulación reducida. Esa satisfacción se incrementa al comprobar que se trata de una figura brillante de un personaje carismático en el universo mutante cuyas virtudes ensombrecen sus defectos técnicos.

Valoración:

David