Marvel Super Heroes: Secret Wars (Comic-pack) Nº1. Collection 1, 2009.
Uno de los villanos de largo recorrido de Marvel que ha tenido el honor, o la mala suerte para él, de enfrentarse con casi todos los pesos pesados de la compañía es Klaw, siendo derrotado una y otra vez desde su primera aparición nada menos que en 1966. Los 4 Fantásticos, Los Vengadores, Galactus, Pantera Negra... incluso Dazzler le ha vencido aprovechando que podía manipular el sonido sólido que compone el cuerpo del pobre Klaw!
Con un papel realmente importante en las Secret Wars, el personaje fue homenajeado por Hasbro al incluirlo en la primera colección de comic packs que celebraban el aniversario del evento superheroico cuando arrancó su colección del Marvel Universe allá por 2009. Y el resultado es espléndido y resalta la sencillez del diseño del personaje al tiempo que su extraño aspecto. Por cierto, se trata de otra de esas figuras de acción un tanto escasas y algo costosa debido a su inclusión en un pack, y en ocasiones puede resultar hasta más rentable hacerse con el comic pack nuevo (que compartía con el Capitán América) antes que con la figura suelta y solitaria.
Klaw, en su versión en plástico y casi cuatro pulgadas de tamaño, utiliza el molde inicial de las figuras del Marvel Universe, en su variante para tipos musculosos pero no demasiado voluminosos sino más bien estilizados y gráciles. Posee quince puntos de articulación y una excelente estabilidad. Es flexible y dinámico, y realmente no necesita una mayor articulación. Carece de los dieciséis puntos habituales de este molde debido a que no posee el de la muñeca derecha, amputada y sustituida por su famosa garra sónica que utiliza como arma ofensiva.
Su uniforme es sencillo: un ajustado mono rojo con un calzón a base de "picos" violeta, patrón de líneas y color que continúan en la parte del uniforme que cubre su cabeza, que se abre y deja ver su temible rostro, un tipo realmente feo con malvada expresión acentuada por sus ojos rojos. Su garra sónica está estupendamente esculpida, es ajustada y proporcionada en su tamaño respecto a la figura y pintada en gris con reflejos azules. Evidentemente, carece de accesorios.
Klaw es una figura sencilla y efectiva, muy bien realizada en lo técnico y en lo artístico. Ideal para fans de la Marvel clásica y de esos villanos tan chapuceros pero carismáticos. Más no se le podía pedir a Hasbro respecto al viejo Klaw, ni siquiera una modernización del molde ni una mayor articulación... bueno, en realidad sí se le podía pedir algo: un mayor número de ejemplares en el mercado que abaratasen el producto. No llega a los niveles de Sue Storm o de Visión, pero excede por mucho su precio real.
David
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