Figura perteneciente al two-pack junto a Legolas Greenleaf, 2012.
Para conmemorar el estreno (con una semana de retraso) de la nueva entrega de El Hobbit, vemos hoy a Tauriel, curioso personaje por un par de motivos: fue incluido en la primera colección de figuras de El Hobbit pese a que no apareció en la primera entrega cinematográfica (cosas del montaje final que alargó la saga de dos a tres películas) y no aparecía en la obra original de Tolkien ya que se trata de una invención puramente cinematográfica.
Ese último dato lo descubrí con el estreno de La Desolación De Smaug ya que me leí El Hobbit hace un millón de años y ni me acordaba de eso. Y reconozco que se trata de un tema controvertido y que pueden rechazar los puristas, pero de lo que hablamos por aquí es otra cosa, y reconozco que se trata de una estupenda figura de acción. Y si eso es debido a la inclusión del personaje en la historia, pues bienvenido sea.
Se trata del típico producto de The Bridge Direct de esta colección: fenomenal decoración y aspecto de la figura, accesorios muy majos y aceptable articulación, en concreto los doce puntos de rigor aunque en el caso de esta elfa el movimiento de las caderas está inhibido por la vestimenta realizada en plástico poco flexible. Su estabilidad no es perfecta, pero si encontramos el punto correcto es difícil que ceda de la posición vertical.
La figura combina elementos imitan los tejidos con partes reforzadas y de protección como en el torso y las muñequeras, todo ello bellamente decorado y con mucho detalle. Los colores predominantes tiran hacia los verdes y los marrones, todo muy boscoso y silvestre, y están fantásticamente combinados; el trabajo en el vestido bajo la coraza es fascinante.
Esos tonos contrastan estupendamente con el rojo color de su larga melena también fantásticamente esculpida con los tirabuzones laterales, una trenza en la parte posterior y como se riza el cabello en su parte final. Aporta gran parte de la belleza y la espectacularidad de la figura.
Bajo su melena encontramos la pequeña pieza donde encajamos su carcaj repleto de flechas, también muy bien esculpido, y sin alterar de forma considerable la silueta del cabello, que adopta de forma leve y elegante la forma adecuada para cobijar el carcaj. Sus otros dos accesorios son un puñal color cobrizo y su arco de curiosa forma. Sólo echo de menos una vaina para el puñal.
El otro gran triunfo de la figura es su rostro, y es que pocas veces he encontrado una figura con un parecido tan conseguido respecto a la persona que encarna al personaje, en este caso Evangeline Lilly, que encarnaba en la serie Perdidos a la mujer que más ha llorado y que peor lo pasaba en la historia de la televisión, culebrones aparte. Es un rostro fino y atractivo, los ojos están bien pintados (¿tan difícil es pintar unos ojos que miren en la misma dirección?) así como sus labios y sus orejas tienen la necesaria forma apuntada de su naturaleza élfica.
Estupenda figura, sí señor, que merecería ser incluida en la nueva colección de El Hobbit, aunque mucho me temo que la cosa está parada; a estas alturas, con la película ya estrenada y la campaña navideña en su auge, ni rastro de ellas. Ni siquiera en la web de The Bridge Direct. Algo huele a podrido en la Tierra Media...
Este mes de diciembre está siendo francamente alocado, como suele ser lo usual. Desconozco si habrá otra entrada antes de Navidad, así que por si acaso... ¡Feliz Navidad estimados lectores!
David
Jejeje, Gandalf le está mirando el culo disimuladamente desde debajo del ala del sombrero.
ResponderEliminar¡Felices fiestas, y que te regalen (o te regales) muchas figuras!
Jejeje, es verdad, qué viejo verde el mago... ¡Felices fiestas a ti también y que bajo tu árbol de Navidad aparezca alguna sorpresa en forma de figura de acción!
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