Basic Figures, Nº SAGA 058, 2006.
Lo bueno de coleccionar figuras de acción de Star Wars es que te puedes centrar en algunas de sus "líneas temáticas" (imperiales, rebeldes, cazarrecompensas, Jabba El Hutt y los suyos, clones, párrocos de la cantina de Mos Eisley, etc.), coleccionarlas todas (algo no muy aconsejable para la salud mental y del bolsillo) o tener un poco de todo. No es este el lugar para aconsejar sobre qué camino seguir, pero una de las "líneas temáticas" más divertidas, satisfactorias y sorprendentes a lo largo de todas las colecciones de Star Wars durante los años es la de los droides.
R5-J2 es otro de esos maravillosos droides astromecánicos que Hasbro nos ha entregado, y especialmente atractivo ya que forma parte de la fuerza de droides al servicio del Imperio. Tan acostumbrados estamos al entrañable R2-D2 que a menudo olvidamos que el Imperio también se beneficiaba del trabajo de estos pequeños y sufridos obreros. Digo atractivo ya que esos droides suelen estar pintados en colores oscuros, si no directamente negros, muy acorde con el Emperador y Darth Vader.
En efecto, R5-J2 es un droide astromecánico de la serie R5, es decir, con el domo no semicircular como los R2 y con la parte superior del mismo algo plana y dividida geométricamente. R5-J2 es una figura magnífica ya que se trata del mismo molde utilizado para el también magnífico R5-D4, perteneciente a la misma Saga Collection de 2006.
La única diferencia es el color. Como ya mencioné, se trata de un droide al servicio del Imperio, concretamente enclavado en la Segunda Estrella de la Muerte durante el Episodio VI, pudiendo ser visto muy brevemente y muy en segundo plano durante el metraje, por lo que el color de su cuerpo es negro solamente aliviado por toques naranjas aquí y allá en su pequeño cuerpo y también metálicos en su estructura; incluso los cables de sus patas provistas de rueda están pintados en un bonito gris plateado.
Las piezas geométricas de la parte superior de su cabeza son de color naranja, y al igual que R5-D4 su antena puede ser extraída y, rotando su domo, su "motivator" sube y baja. El resto de la articulación es sencilla pero perfecta y adecuada: las dos patas laterales, sus dos "pies" y la pata central también extraíble y provista de ruedas.
El único problema de la figura es su fidelidad respecto a El Retorno Del Jedi. No se trata, exactamente, del mismo droide. En efecto es una unidad R5, pero al utilizar el molde del droide del Episodio IV R5-D4 la antena sobra (aunque eso no es un gran problema, ya que podemos retirarla o ponérsela cuando queramos) y el domo no es igual del todo, ya que el droide imperial tiene sólo dos fotorreceptores en lugar de tres, y dispuestos de forma más prominente. Parece que Hasbro mezcló dos unidades R5 presentes en la Estrella de la Muerte (R5-A1 es el otro) en uno sólo, con el domo del droide equivocado en el cuerpo de R5-J2.
Si hacemos un poco la vista gorda sobre esa inexactitud fílmica, cosa que recomiendo, podemos recibir a un excelente droide astromecánico, alineado con el ejército imperial nada menos y pintado en un temible y resplandeciente color negro, en nuestras colecciones.
David
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