jueves, 27 de junio de 2019

COILS O'DOOM (M.A.R.S. MERCENARY) (G.I. JOE: ADVENTURE TEAM)

G.I. Joe Club Exclusive (Final 12), Nº 12 of 12, 2018.
En el tributo al Adventure Team del G.I. Joe Club en sus doce últimas figuras y acompañando al G.I. Joe del grupo de héroes que ya vimos, el Club creó un nuevo villano como su contrapartida, el mercenario irlandés especialista en misiones de sabotaje y en demoliciones Coils O'Doom.
O'Doom trabaja a sueldo de M.A.R.S., la organización némesis del Adventure Team, aunque como accesorio incluye una cobra roja como guiño-enlace con la era ARAH y la organización maligna de ésta; esa serpiente es un repintado de una pieza muy utilizada en la licencia y que ya vimos, por ejemplo, con el Comandante Cobra de The Rise Of Cobra.
El propio mercenario es un compendio de piezas reutilizadas, tomando como cuerpo el de Firefly de la colección Retaliation y repintándolo radicalmente; dos tonos de verde, uno bastante llamativo, se combinan en el uniforme, acorde a la procedencia irlandesa del personaje, y añadiendo el escudo de M.A.R.S. en su pecho. 
La cabeza también viene de antes, concretamente de la figura de Cesspool lanzada por el propio G.I. Joe Collectors' Club en 2014, una pieza realmente impactante debido a la gran cicatriz que cruza el lado derecho de la cara. Esa cicatriz ha sido repintada en un tono más rosáceo, O'Doom conserva ambos ojos (Cesspool no tiene el del lado cruzado por la cicatriz) y el cabello anteriormente canoso es ahora pelirrojo con las sienes blancas. Su sonrisa maliciosa completa su villanesco retrato.
Los accesorios del mercenario no está mal: la citada cobra, el soporte personalizado, una pistola y un cuchillo, una escopeta y un lanzagranadas y dos artefactos explosivos para sus misiones terroristas.
Pese a ser una creación nueva del Club, Coils O'Doom es un consistente personaje que viene a sumarse a las filas de villanos, encaja muy bien tanto en una etapa previa a los G.I. Joe de los 80 como integrado en las filas de Cobra, y su aspecto retro y excesivo, incluso kitsch, está muy logrado y podemos imaginarlo perfectamente formando parte de una línea de juguetes de los años 70!
Valoración (sobre 5):
David

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